lunes, 23 de julio de 2007

"Estamos aquí para escribir con digno esfuerzo nuestra historia": Zebedeo


Traslado del caracol de Oventic al de Morelia, Chiapas, para continuar con el encuentro convocado por los zapatistas

HERMANN BELLINGHAUSEN


Ejido Morelia, Chis., 22 de julio. Desde una larga mesa que reúne a la comandancia zapatista, a las autoridades autónomas de la región Tzoj Choj y a representantes de Vía Campesina de diversos países, se escucha esta noche de domingo una cadena de bienvenidas cordiales y hasta juguetonas, sobre todo cuando toma la palabra el comandante Zebedeo. El numeroso presídium está en un altísimo estrado, erigido especialmente para este segundo Encuentro de los Pueblos Zapatistas con los Pueblos del Mundo. A sus pies se curva el arco iris que siempre ha caracterizado el espíritu de este caracol.

leer más

Indígenas dan otro paso en unidad, rebeldía y resistencia, afirma David

La lucha también se da con canto, baile y risa, afirma

ELIO HENRIQUEZ

Oventic, Chis., 22 de julio. Las reuniones con pueblos de todo el planeta forman parte del proceso de lucha del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) en busca de la transformación de la sociedad, afirmó el comandante David.

seguir leyendo

La revancha de la Guelaguetza

HERMANN BELLINGHAUSEN

La Guelaguetza es una invención relativamente nueva, pero eso tal vez ya no importa. Tiene fecha de nacimiento (1932), gobernador a cargo (Francisco López Cortés), presidente de la República que apadrine (Abelardo Rodríguez, interino, en 1933), punto débil (nace de una idea racista: rendir “homenaje racial” a los oaxaqueños de abajo), y la coyuntura humanitaria del terremoto que en 1931 dañó gravemente a Oaxaca y la Federación le debió tender la mano. La Guelaguetza urbana, nacida de un terremoto, llega a sus 76 años sacudida por otro.


Lo importante hoy es que sirve para subrayar, una vez más, qué país más vergonzozo es éste, que permite la permanencia de un gobierno ilegítimo, delincuencial y violento como el de Ulises Ruiz Ortiz. La “disputa” por la Guelaguetza devino revuelta de lo simbólico en un terreno dolorosamente real y concreto.

seguir leyendo

No hay comentarios: